En el velorio de un amigo
Nadie dudó que R hubiera sido el mismo quien descargó el tambor completo del arma justo en la sién. Siete veces ininterrumpidamente.
Depronto, alguien preguntó ¿cómo era posible que él mismo se hubiese disparado siete veces en la cabeza?
La concurrencia se rió de buena gana pues a todos les parecía obvio, el informe del comisario Pólvora era “básicamente claro”:
“sujeto muerto a causa del él mismo, por motivo de desesperación marital avanzada, mediante arma de su esposa comprada el mismo día del suicidio...”
- Lo oyes...suicidio – recalcó alguien entre el público
- Sí, yo sé que es difícil dudar de lo escrito, pero..¡siete veces en el mismo punto!..poco probable – replicó otro.
- No se diga más, lo escrito escrito está, o quieres defender tu punto frente a la Real Academia de la Lengua – Susurró una dama polisémica que pasaba por el leaving...
- Por supuesto que no, sólo digo que dispararse siete veces en la cabeza uno mismo es algo heróico, más que epopéyico, fantástico, parace sacado de una novela inverosimil. Pero tienen razón, no tengo motivos para dudarlo y es mejor así – Respondo tratando de concluir.
- Claro que sí, mejor bebamos una copa para olvidar...lo – Dijo la esposa.
- Pero el recuerdo de R, que también muera en nuestra memoria – Digo.
- Amen! Respondieron todos a coro.
Esa mujer superficial trata de mirar por el rabillo del ojo al cadaver, con indignación y alivio -creo-, así se libera de ese fantasma que la está atormentando. Cada bala es un año; así, se puede lavar las manos de culpas. Amén.
Anónimo
24 de diciembre de 2007, 0:55Dudo ahora que R haya sido tan buen sujeto.
La gente normal
25 de diciembre de 2007, 20:42PIENSO QUE NO ES MÁS QUE UNA HISTORIA CONTEMPORANÉA QUE SUCEDE DIARIAMENTE... NO NOS DAMOS A LA TAREA DE INDAGAR LO VERIDICO POR QUE CREEMOS QUE LO QUE ESTÁ ESCRITO, O LO QUE DICEN LOS MEDIOS NUNCA PODRÁ SER INVEROSIMIL...
Anónimo
17 de enero de 2008, 0:09Es una mueca tragicómica, me gusta
Anónimo
23 de enero de 2008, 17:42